LA PRIMERA COMUNIÓN DE INÉS

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Hola a tod@s!!!!

Ya  ha terminado mayo, un mes plagado de días en los que los niños reciben su Primera Comunión.

Yo lo recuerdo como un día muy especial para mí, como buena católica y en aquellos años alumna de un colegio de monjas, era la primera vez que comulgaba, lo que yo consideraba algo muy importante y claro también era la protagonista del día.

La tradición de la Primera Comunión sigue vigente hoy en día, si bien no de la misma manera que hace años. Tanto las ceremonias religiosas como las celebraciones posteriores han ido evolucionando y adaptándose a los tiempos.

Como ya os comenté en un pasado post, este sábado asistí a la Primera Comunión de mi sobrina Inés.

No hace falta que os explique la gran ilusión que la niña tenía porque llegara este día, se había preparado perfectamente los textos que tenía que leer durante la misa y junto con sus padres había estado eligiendo todos los detalles para la fiesta de después.

Bajo mi punto de vista, los vestidos de las niñas deben ser lo más sencillos posibles, ya que son eso, niñas y no unas novias en miniatura.

Inés vistió un vestido blanco de plumeti, con fajín y bailarinas en rosa,  un pequeño tocado en el pelo y como joyas un reloj y un conjunto de pendientes y anillo con pequeñas florecillas.

La ceremonia religiosa, de la cual no os enseño fotos, fue muy emotiva. Participaron activamente tanto los niños como sus padres, muy nerviosos y emocionados,  y también los familiares y amigos ya que hubo muchas canciones e incluso un baile final.

En el vestuario de las invitadas predominaron los vestidos de una pieza y pequeños bolsos, os enseño mi outfit para la ocasión en las siguientes fotos.

Llevé un vestido con frunce debajo del pecho en color berenjena de ASOS, sandalias en dorado de PILAR BURGOS y joyas de LADA JEWELRY. Como complemento un bolso en forma de cojín de hueso en color negro con adornos en dorado.

Para la comida nos trasladamos a la ALQUERIA EL MACHISTRE, en Alboraia.  Una casa de campo típica Valenciana, donde la decoración era preciosa y te sentías como en otra época.

En el comedor predominaban los colores blanco y rosa, los elegidos por la protagonista del día.

Botellas y utensilios de arado colgaban de paredes y techo, una preciosa lámpara de cristal coronaba una de las mesas que estaban adornadas con ramilletes de flores silvestres. Y no puedo olvidarme de la zona de la granja donde los animales hicieron las delicias de los niños.

Después de degustar el menú, cuyos platos principales fueron arroz y fideuá, llego el esperado momento de cortar la tarta, riquísima de tres chocolates.

Los niños además de pasárselo bomba con la animación, de temática de la película FROZEN, en la que hicieron un montón de actividades incluso una gincana, no dejaron de colorear los mantelitos individuales que cada uno tenía en la mesa.

Otro de los momentos más esperados de la tarde, era el asalto a la mesa de chucherías.

No quedaron ni las migas, y no solo por parte de los niños, que los mayores también dimos buena cuenta de los dulces.

Después de marcarnos unos bailes en la pista, pudimos disfrutar de la excelente temperatura que hacía en otra zona de la alquería, donde nos sirvieron una buenísima horchata valenciana acompañada de coca de chufa y fartons. Mientras tanto las más atrevidas no dejaban de bailar sevillanas.

Como detalle final, los invitados fuimos obsequiados con un recordatorio en forma de marca páginas y para las señoras había unos pequeños jaboncitos con nuestras iniciales. Para los peques también hubo regalos como cajitas personalizadas con chocolates para cada uno y pequeños bastidores con un dibujo bordado para las niñas.

Fue un día maravilloso en el que disfrutamos muchísimo y compartimos con Inés.

Besitos y nos vemos pronto!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

 

Contacto: happyfourties@gmail.com

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